Puente colgante de holtzarte

Pasarela de Holtzarte

Y aquí estoy revelando todos estos hermosos archivos usando VSCO y Lightroom, y de alguna manera estoy disfrutando lo que veo. No me pregunten por cosas técnicas, si a mis ojos les gusta, entonces soy feliz. Me encantó la experiencia de fotografiar y me encantaría trabajar con mi sistema de filtros Lee y esta cámara. Probablemente lo que no me gustó fue que para bajar a ISO 100 (para hacer exposiciones largas), tuve que sacrificar el disparo en Raw… pero supongo que podría haberlo evitado usando filtros. De todos modos, estas exposiciones largas de 1 segundo, F22, ISO 100, Jpeg tampoco están mal, sólo son diferentes a mi flujo de trabajo.  Después de estas dos exitosas caminatas, cruzamos los Pirineos para volver a casa. La nieve y el ambiente de niebla hacían que las montañas tuvieran un aspecto espectacular y cambiante. Hacía mucho viento, pero almorzar con la calefacción encendida y rodeados de este paisaje, fue una manera perfecta de terminar nuestro viaje por carretera.

Garganta de Taroko 5/5/10 – vid 3 puente colgante parte 1 de 2

Hoy hemos tenido un viaje inesperado a los altos Pirineos y ha resultado ser una experiencia sensacional para los oídos, incluso antes de llegar a nuestro objetivo principal, que era el puente colgante de Holtzarte, de estilo himalayo, que se balancea suavemente a unos 200 metros por encima de la garganta boscosa.

El viaje fue inesperado en dos sentidos. Teníamos previsto visitar San Sebastián, pero una avería en el transporte lo impidió. Así que nos dirigimos hacia el este, hacia los Pirineos, y entonces Suzy, nuestra señora de la navegación por satélite, se encargó de desviarnos por la N310.

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A medida que nos elevábamos por las estrechas carreteras de los granjeros, en una zona donde se fabrica el famoso queso de oveja Ossau Iraty, el paisaje era cada vez más espectacular, y la carretera, más estrecha. A veces, al tomar una curva, sólo se veía el cielo. No es momento de marearse.

Debería haber elegido otra carretera, la D18, que era bastante espectacular en sí misma, como comprobamos de camino a casa. El retraso nos costó bastante tiempo, pero el viaje a las alturas -creo que algunos de los puertos tenían unos 1600 metros- fue memorable.

Pasarela Holtzarte

Situada a una hora de Pau, Haute-Soule ofrece un paisaje de bosques, colinas y gargantas.  Desbordante de aves rapaces, el territorio es propicio para la acción y la imaginación.  Para una aventura de interior o para emocionar a la familia en plena naturaleza, visite las gargantas de Holzarte y Kakuetta .  Después de ellas, ¡no se pierda La Verna!  Escalofríos garantizados en la espina dorsal.

¿Sufre de vértigo?  Pues está de suerte.  A poca distancia de Larrau, llegará a la pasarela (el puente de los monos) de Holzarte, ¡de casi 180 metros de altura!  Al cruzar este puente colgante, contemple el cañón de Olhadubi.  Un delicioso momento de equilibrio entre el cielo y la tierra.  Este lugar es uno de los más espectaculares de los Pirineos occidentales.

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Para visitar el desfiladero de Kakuetta, le aconsejamos que se ponga un calzado resistente porque, aunque una estrecha pasarela y una barandilla le ayuden a guiar sus pasos en el corazón del desfiladero, la humedad hace que el suelo sea resbaladizo.  Las paredes rocosas empapadas de humedad se elevan a 350 m, donde las aves de rapiña revolotean.  Su excursión está acompañada por el grito de los pájaros y la música de los torrentes que brotan de la cueva, y al final de su paseo, entrelazados por estalactitas y estalacmitas, como si protegieran un secreto.  El paseo dura 2 horas (la ida y la vuelta), pero también puede pasar allí un día entero, según le apetezca.  Después de esta experiencia en las gargantas, estará listo para adentrarse en las entrañas de la tierra, a pocos minutos, en el Alverna.

El Puente colgante Charles Kuonen Hängebrücke o

La localidad francesa de Larrau, perteneciente a la región de Aquitania, dentro del departamento de los Pirineos Atlánticos, alberga en su término municipal, en la frontera con la vecina Navarra, innumerables rincones con encanto como la Pasarela de Holzarte. Montañas colosales y profundas gargantas esculpidas por el incansable paso de los ríos que las atraviesan forman parte del sello del histórico territorio vasco-francés.

Sobre uno de estos profundos desfiladeros se asienta la Pasarela de Holzarte, suspendida en el aire a unos 150 m del suelo y uniendo las dos vertientes del desfiladero, este vertiginoso puente fue construido allá por los años 20 por la industria maderera. La ruta con 4 Km en total nos permite recorrer en su inicio el fondo del cañón siguiendo el curso del río que lo ha formado. A cada paso iremos subiendo la ladera de la montaña despidiéndonos de la agradable compañía del río mientras atravesamos un denso bosque en busca de la parte superior del desfiladero.

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Una solitaria y hermosa cascada es el preludio de la dura cuesta que nos espera. Una descarnada senda de montaña que nos permitirá remontar el desfiladero y contemplar en todo su esplendor la Pasarela de Holzarte, testigo de la unión de dos profundas gargantas Olhadubi y la de Holzarte de la que toma su nombre. Cruzar este puente colgante mientras nos balanceamos movidos por el viento y la inercia que llevamos es una experiencia reservada a los aventureros más intrépidos.