Escultura de los aztecas
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estatua de la coatlicue
Panorama general: La escultura aztecaAl igual que muchas culturas mesoamericanas, los aztecas destacaron en la realización de esculturas de piedra que iban desde pequeñas obras de arte hasta edificios monumentales. La escultura azteca a menudo adoptaba la forma de llamativas tallas de dioses aztecas o criaturas míticas, y se expresaba a través de la cerámica, la arquitectura, las obras de piedra tridimensionales independientes y el trabajo en relieve. La gran ciudad de Tenochtitlan contenía algunos de los mejores ejemplos de escultura azteca, desde sus templos y pirámides hasta sus elaborados palacios de piedra.
Motivos aztecasArte cranealUna gran parte de la escultura azteca incorporaba el motivo de la calavera; hoy se conoce en México como “arte craneal”. En la tradición azteca, la muerte y la vida se veneran juntas, y la calavera -símbolo de la muerte- era una promesa de resurrección. El uso de cráneos y esqueletos en el arte azteca se originó antes de la conquista, y los aztecas solían tallar cráneos en sus esculturas de piedra, monolitos de lava y máscaras de obsidiana y jade.
Espejos talladosUna forma única y versátil de escultura era el espejo tallado. En la época precolombina, los espejos de obsidiana se fabricaban en piedra y tenían diversos usos, desde decorativos hasta espirituales. Durante el periodo postclásico tardío (c.1200-1521), estos espejos, que simbolizaban el poder y la autoridad, se utilizaban en rituales para acceder espiritualmente al inframundo azteca y comunicarse con el reino de los muertos. Los espejos aztecas se colocaban originalmente en marcos de madera y se decoraban con adornos perecederos, como plumas. Durante la conquista española, se sabe que Hernán Cortés envió espejos de obsidiana a la corte real de España, donde se coleccionaron ampliamente entre la aristocracia europea.
arte azteca
Visión general: La escultura aztecaAl igual que muchas culturas mesoamericanas, los aztecas destacaron por sus esculturas en piedra, que iban desde pequeñas obras de arte hasta edificios monumentales. La escultura azteca a menudo adoptaba la forma de llamativas tallas de dioses aztecas o criaturas míticas, y se expresaba a través de la cerámica, la arquitectura, las obras de piedra tridimensionales independientes y el trabajo en relieve. La gran ciudad de Tenochtitlan contenía algunos de los mejores ejemplos de escultura azteca, desde sus templos y pirámides hasta sus elaborados palacios de piedra.
Motivos aztecasArte cranealUna gran parte de la escultura azteca incorporaba el motivo de la calavera; hoy se conoce en México como “arte craneal”. En la tradición azteca, la muerte y la vida se veneran juntas, y la calavera -símbolo de la muerte- era una promesa de resurrección. El uso de cráneos y esqueletos en el arte azteca se originó antes de la conquista, y los aztecas solían tallar cráneos en sus esculturas de piedra, monolitos de lava y máscaras de obsidiana y jade.
Espejos talladosUna forma única y versátil de escultura era el espejo tallado. En la época precolombina, los espejos de obsidiana se fabricaban en piedra y tenían diversos usos, desde decorativos hasta espirituales. Durante el periodo postclásico tardío (c.1200-1521), estos espejos, que simbolizaban el poder y la autoridad, se utilizaban en rituales para acceder espiritualmente al inframundo azteca y comunicarse con el reino de los muertos. Los espejos aztecas se colocaban originalmente en marcos de madera y se decoraban con adornos perecederos, como plumas. Durante la conquista española, se sabe que Hernán Cortés envió espejos de obsidiana a la corte real de España, donde se coleccionaron ampliamente entre la aristocracia europea.
esculturas aztecas famosas
Al igual que muchas culturas mesoamericanas, los aztecas destacaron por sus esculturas en piedra, que iban desde pequeñas obras de arte hasta edificios monumentales. La escultura azteca solía adoptar la forma de llamativas tallas de dioses aztecas o criaturas míticas, y se expresaba a través de la cerámica, la arquitectura, las obras de piedra tridimensionales independientes y los trabajos en relieve. La gran ciudad de Tenochtitlan contenía algunos de los mejores ejemplos de escultura azteca, desde sus templos y pirámides hasta sus elaborados palacios de piedra.
Gran parte de la escultura azteca incorporaba el motivo de la calavera; hoy se conoce en México como “arte de la calavera”. En la tradición azteca, la muerte y la vida se veneran juntas, y la calavera -símbolo de la muerte- era una promesa de resurrección. El uso de cráneos y esqueletos en el arte azteca se originó antes de la conquista, y los aztecas solían tallar cráneos en sus esculturas de piedra, monolitos de lava y máscaras de obsidiana y jade.
Una forma única y versátil de escultura era el espejo tallado. En la época precolombina, los espejos de obsidiana se fabricaban en piedra y tenían diversos usos, desde decorativos hasta espirituales. Durante el periodo postclásico tardío (c.1200-1521), estos espejos, que simbolizaban el poder y la autoridad, se utilizaban en rituales para acceder espiritualmente al inframundo azteca y comunicarse con el reino de los muertos. Los espejos aztecas se colocaban originalmente en marcos de madera y se decoraban con adornos perecederos, como plumas. Durante la conquista española, se sabe que Hernán Cortés envió espejos de obsidiana a la corte real de España, donde se coleccionaron ampliamente entre la aristocracia europea.
esculturas de arcilla aztecas
Las esculturas van desde la miniatura hasta la escala monumental. Los escultores trabajaban tanto en bajo relieve como en redondo, y a menudo los dos estilos son inseparables, ya que las estatuas solían incluir escenas o símbolos tallados en relieve.
Las esculturas de los dioses eran un aspecto importante de la expresión religiosa azteca. Las estatuas se colocaban delante de los altares, elementos esenciales de cada hogar azteca, y se hacían para adornar santuarios y templos o para ser colocadas al aire libre. De este modo, el pueblo era constantemente consciente de las fuerzas que gobernaban el universo y sus vidas.
Debido a la pérdida y el deterioro de gran parte del arte azteca, la escultura no sólo es la más duradera y posiblemente impresionante, sino también la más importante. Es a través de la escultura, y de la representación de los dioses, que obtenemos una mejor comprensión de la religión azteca.
Los aztecas no sólo tenían sus propios dioses, sino dioses que habían adoptado como resultado de la captura de otras ciudades. Cada dios y su escultura eran reconocibles al instante. Cada dios, y sus esculturas, eran reconocibles al instante. Por ejemplo, aunque los dioses del agua y la vegetación llevaban tocados similares, los colores eran diferentes. Se han elegido por su representación en la escultura, por su importancia para la religión azteca y también para ayudar a comprender su historia y sus mitos.