Pisos proteccion oficial tarragona
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en tarragona, en la región de cataluña, se levanta el “edificio de viviendas sociales” del estudio español aguilera/guerrero arquitectos. descansando en una parcela de forma irregular, la huella cuadrangular y curvada del edificio es una respuesta a sus límites. las escaleras a lo largo del edificio sortean los cambios extremos de topografía a lo largo de su pequeña huella. interactuando con el contexto existente que rodea el solar, el comercio a nivel de calle se sitúa frente a las zonas peatonales. un perfil de elevación en forma de L sitúa las tiendas dentro de su base a nivel de calle. orientados hacia las vistas, tres niveles de balcones dentro de cada uno de los dos volúmenes apilados se abren a lo largo de diferentes elevaciones para ofrecer los mejores puntos de vista a los habitantes. los espacios internos como la sala de estar, el dormitorio y el baño son de tamaño fijo entre las unidades.
el exterior blanco se enmarca o se cubre con una atrevida pantalla roja para abrirse a las vistas u ofrecer intimidad. la cáscara actúa como una doble fachada ventilada que responde al clima cálido y seco. los paneles metálicos estriados verticalmente ofrecen efectos ópticos, así como una protección impermeable contra la intemperie.
Vivienda pública
Descripción del texto proporcionada por los arquitectos. El proyecto, municipal encargado de construir 4.516m2HP. El lugar se sitúa al Norte de la ciudad, en un entorno de campos de cultivo y zona arbolada de gran calidad paisajística y visual, configurado en un edificio de viviendas unifamiliares bajo un trazado urbano bastante ordenado y comprensible. Decidir cómo invertir y dar forma a 4516 m2 construibles, colonizar el lugar significaba adaptarlo a nuestros propósitos, “al impacto de la arquitectura”. Se trataba, en cierto modo, de comprender qué atributos del lugar debían conservarse y cuáles debían desaparecer o transformarse.
Análisis de la superficie a construir, para lograr una distribución sostenible, proporcionada y equitativa entre las viviendas propuestas. Las primeras operaciones, en agrupaciones de “masas construidas” y su colocación en el terreno. Se pensó como una gran retícula geométrica. Una retícula geométrica como herramienta de racionalidad sobre el mundo natural y como principio técnico que facilita la construcción, construcción económica + racionalidad técnica. La clara diferenciación de la propuesta, con respecto al entorno urbano, dice su condición de ENCLAVE.
114 viviendas de protección oficial
Salou está en la costa sur de Tarragona. Las Montañas de Prades discurren paralelas al litoral a unos 25 kilómetros, y el aire húmedo procedente del mar se encuentra con la cordillera y se condensa en forma de lluvia que cae en las escarpadas laderas de las montañas y riega la fértil llanura. Este ciclo caracteriza el paisaje agrícola de la zona. La lógica del modelo agrícola y su interacción con los ciclos naturales choca con el modelo de crecimiento urbano, que ve el terr
Los apartamentos tienen dos orientaciones opuestas y proponen una secuencia transversal de espacios -pasarela, vivienda y terraza- que mejoran la versatilidad y favorecen la adaptación a diferentes tipos de uso y clima.
El pliego de condiciones del concurso pedía el diseño de 80 viviendas de protección oficial en el extremo norte de Salou. Planteado como una nueva trama urbana que prevalece sobre el patrón agrícola existente, el nuevo emplazamiento se compone de grandes parcelas que contienen edificios independientes dispuestos ortogonalmente. La normativa define dos volúmenes iguales en la esquina de una de las manzanas urbanas y en contacto con el nuevo parque. Con una planta de 15×52 metros, cada uno de ellos está colocado de forma que el sol se abra paso en su interior. Tras reflexionar sobre cuestiones como la porosidad y la relación con el entorno, y persiguiendo un crecimiento acelerado, la propuesta se centra en la importancia de los espacios intermedios, las transiciones y los umbrales como vínculos para establecer una relación continua entre los distintos espacios. Así, el proyecto propone un tejido con varios grados de intervención, cuyo programa de vivienda social fomenta la interacción entre los usuarios.
Se realizan tres actuaciones en tres fases distintas, temporales y de proyecto. Las dos primeras actuaciones conforman el perímetro del cuadrilátero irregular de la parcela y son muy diferentes desde el punto de vista formal – volumétrico.
Un recorrido por el LUGAR, la topografía, la orientación, las vistas, el vacío urbano, las alineaciones, los volúmenes y las composiciones, … etc. nos han dado los trazos iniciales para la definición formal del proyecto, que por su posición privilegiada siempre pensamos que debía ejercer de ARTICULADOR del lugar y por tanto, ser una pieza rotunda que intentara conciliar la relación entre los volúmenes construidos y su entorno.
El nuevo edificio se retira del perímetro curvo del solar, se agrupa en el centro en forma de “L”, toma diferentes alturas formando una figura plástica coherente, se ordena como fondo del espacio público que se genera y proporciona continuidad visual con el entorno.
El paso de la forma abstracta, resultado de la proyección de la reflexión, a la forma construida, resultado de la presencia física de los materiales, es lo que en definitiva da la calidad visual del edificio que especifica y singulariza cuando lo sometemos a las exigencias de su propia realización y construcción.
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