Federico de madrazo museo del prado
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Federico de madrazo y kuntz – retratos
Coincidiendo con la exposición antológica Mariano Fortuny (1838-1874) organizada por el Museo del Prado (21/11/2017-18/03/2018) y comisariada por Javier Barón, conservador jefe de pintura del siglo XIX, la Fundación María Cristina Masaveu Peterson publica Epistolario del Archivo Madrazo en el Museo del Prado. I. Cartas de Mariano Fortuny, Cecilia, Ricardo, Raimundo e Isabel de Madrazo, de Ana Gutiérrez Márquez y Pedro J. Martínez Plaza, conservadores del Departamento de Pintura del Siglo XIX del Museo del Prado.
El libro recoge un total de 383 cartas escritas por el pintor, su esposa Cecilia de Madrazo, sus cuñados Ricardo y Raimundo y su cuñada Isabel, la mayoría de las cuales fueron enviadas a Federico de Madrazo, suegro y padre de los remitentes, respectivamente. Fechadas entre 1863 y 1919, sus contenidos aportan una visión inestimable de Fortuny, uno de los pintores españoles del siglo XIX con mayor proyección internacional. Gracias a la información vertida en muchas de estas cartas, se ha podido dar respuesta a ciertas preguntas sobre su vida, su obra y su arte, a la vez que se han esclarecido sus propias opiniones sobre el panorama cultural e histórico de su época. Además, las cartas son esenciales para el estudio de las relaciones personales y sociales de Madrazo, a la vez que aportan una gran cantidad de información sobre las biografías y trayectorias de muchos artistas españoles e internacionales, y sobre un amplio abanico de acontecimientos que se produjeron tanto en España como en París, Roma y Venecia.
Federico de madrazo y kuntz (1815-1894)
Coincidiendo con la exposición antológica Mariano Fortuny (1838-1874) organizada por el Museo del Prado (21/11/2017-18/03/2018) y comisariada por Javier Barón, conservador jefe de pintura del siglo XIX, la Fundación María Cristina Masaveu Peterson publica Epistolario del Archivo Madrazo en el Museo del Prado. I. Cartas de Mariano Fortuny, Cecilia, Ricardo, Raimundo e Isabel de Madrazo, de Ana Gutiérrez Márquez y Pedro J. Martínez Plaza, conservadores del Departamento de Pintura del Siglo XIX del Museo del Prado.
El libro recoge un total de 383 cartas escritas por el pintor, su esposa Cecilia de Madrazo, sus cuñados Ricardo y Raimundo y su cuñada Isabel, la mayoría de las cuales fueron enviadas a Federico de Madrazo, suegro y padre de los remitentes, respectivamente. Fechadas entre 1863 y 1919, sus contenidos aportan una visión inestimable de Fortuny, uno de los pintores españoles del siglo XIX con mayor proyección internacional. Gracias a la información vertida en muchas de estas cartas, se ha podido dar respuesta a ciertas preguntas sobre su vida, su obra y su arte, a la vez que se han esclarecido sus propias opiniones sobre el panorama cultural e histórico de su época. Además, las cartas son esenciales para el estudio de las relaciones personales y sociales de Madrazo, a la vez que aportan una gran cantidad de información sobre las biografías y trayectorias de muchos artistas españoles e internacionales, y sobre un amplio abanico de acontecimientos que se produjeron tanto en España como en París, Roma y Venecia.
Obra comentada: noli me tangere, de pedro núñez del valle
Pintor y litógrafo. La calidad de sus retratos de los miembros de la Corte y de personalidades de la vida cultural le valió fama internacional. Fue director de la Real Academia de San Fernando y del Museo del Prado”.
Nació en Roma en 1815. Hijo del santanderino José de Madrazo y Agudo, fue pintor de la Corte, director de la Real Academia de San Fernando y de la Galería del Rey (posteriormente Museo del Prado). Fue el pintor español más cotizado del segundo tercio del siglo XIX, y gozó de una reputación inigualable tanto en España como en el extranjero. Ello se debió a su entorno familiar, a su situación social y, sobre todo, a su temprana formación artística por parte de su padre. Era hermano de Pedro de Madrazo, célebre hombre de letras, crítico y autor de varios de los primeros catálogos del Museo del Prado. Otro de sus hermanos, Juan, fue el arquitecto que proyectó la restauración de la Catedral de León. Murió en Madrid en 1894.
Damien hirst en la tate modern | ft arts
Recibió su primera instrucción de su padre. Mientras asistía a las clases de la Real Academia de San Fernando, pintó su primer cuadro, La resurrección de Cristo (1829), que fue adquirido por la reina Cristina. Poco después pintó Aquiles en su tienda, y posteriormente presentó a la academia La continencia de Escipión, que le valió ser admitido como miembro “por méritos”[6].
Mientras decoraba el palacio de Vista Alegre, se dedicó al retrato. En 1832 viajó a París, donde estudió con Franz Winterhalter, y pintó retratos del barón Taylor y de Ingres. En 1837 se le encargó un cuadro para la galería de Versalles, y pintó “Godofredo de Bouillon proclamado rey de Jerusalén”. El artista regresó entonces a Roma, donde trabajó en varios temas, sagrados y profanos. Luego pintó a María Cristina vestida de monja junto al lecho de Fernando III (1843), a la reina Isabel, a la duquesa de Medinaceli y a la condesa de Vilches (1845-47), además de varios retratos de la aristocracia española, algunos de los cuales fueron enviados a la exposición de 1855[6].