Esculturas de jorge marin
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Alas de jorge marín
Nacido en Uruapan, Michoacán (México), el escultor Jorge Marín compara su infancia con la que vivió en Macondo, el pueblo ficticio que aparece en la novela de Gabriel García Márquez, Cien años de soledad. Lo que ilustra su visión artística (y mítica) del mundo que le rodea.
Marín nació en una de las regiones más prolíficas en aguacates de México. Uruapan reclama el título de “Capital Mundial del Aguacate”, gracias a sus seis instalaciones de envasado. Los aguacates de Uruapan se envían a Estados Unidos, Centroamérica, Europa y Japón. Y eso hace que los aguacates sean una industria importante en la región. Como se puede imaginar, la vida de Jorge Marín podría haber sido muy diferente. Pero el arte le llamó. Y él respondió. Gracias, Dios.
Su obra abarca desde la miniatura hasta la monumentalidad, y algunas de sus obras más reconocibles incluyen sus alas de gran tamaño. Apropiadamente, la colección se llama Las Alas de México y se han expuesto e instalado en todo el mundo. Museos, aeropuertos y parques públicos, desde Shangai a Dubai, desde Berlín a París, han acogido las alas.
Alas de méxico jorge marín
Marín nació en Uruapan, Michoacán, México. El más joven de una familia de diez hermanos (que incluye a Javier Marín, colega y hermano), Jorge Marín heredó su pasión por las bellas artes de su padre, un conocido arquitecto.
Dejó Uruapan, Michoacán, para vivir en Ciudad de México cuando tenía siete años. Marín recuerda sus primeros años en la ciudad de Uruapan como algo parecido a vivir en “Macondo”, el pueblo místico de la novela de Gabriel García Márquez Cien años de soledad.
Su obra se centra principalmente en la figura humana como metáfora de sus propias experiencias. Su estilo tiene una fuerte base en la integración del arte dramático barroco con una poderosa sensualidad y un sutil sentido de lo perverso. Sin complicaciones y de fácil lectura, su obra es accesible a un amplio público.
Desde el 7 de septiembre de 2010, una de las exposiciones más representativas de la obra del escultor se encuentra en el Paseo de la Reforma, en el camellón frente al Museo de Antropología, titulada “Las alas de la ciudad”.
Se vende escultura de jorge marin
Nacido en Uruapan, Michoacán, México, el escultor Jorge Marín compara su infancia con la que vivió en Macondo, el pueblo ficticio que aparece en la novela de Gabriel García Márquez, Cien años de soledad. Lo que ilustra su visión artística (y mítica) del mundo que le rodea.
Marín nació en una de las regiones más prolíficas en aguacates de México. Uruapan reclama el título de “Capital Mundial del Aguacate”, gracias a sus seis instalaciones de envasado. Los aguacates de Uruapan se envían a Estados Unidos, Centroamérica, Europa y Japón. Y eso hace que los aguacates sean una industria importante en la región. Como se puede imaginar, la vida de Jorge Marín podría haber sido muy diferente. Pero el arte le llamó. Y él respondió. Gracias, Dios.
Su obra abarca desde la miniatura hasta la monumentalidad, y algunas de sus obras más reconocibles incluyen sus alas de gran tamaño. Apropiadamente, la colección se llama Las Alas de México y se han expuesto e instalado en todo el mundo. Museos, aeropuertos y parques públicos, desde Shangai a Dubai, desde Berlín a París, han acogido las alas.
Jorge marin instagram
Jorge Marín es un escultor mexicano conocido por sus representaciones de criaturas míticas, como centauros y ángeles enmascarados. Suele trabajar en bronce oxidado y metales mixtos, lo que confiere a su obra una estética industrial. En su obra
Estudio de Cabeza de Ángel, el artista esculpe el busto de un hombre desfigurado con la piel en descomposición y un gran pico, que recuerda a los personajes mitológicos. “Quería compartir con el gran público una de mis obsesiones, que es la posibilidad de ir más allá de nuestras limitaciones físicas”, dijo sobre su obra. “Metafóricamente, podemos volar al lugar que deseemos”. Nacido el 22 de septiembre de 1963 en Uruapan, México, estudió diseño gráfico en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de México y restauración de arte en la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museología. En 2010, el artista recibió la atención de la crítica por su obra de instalación
Wings of the City, en la que instaló alas incorpóreas en Ciudad de México, Dallas y Denver para fomentar una mayor colaboración y respeto entre Estados Unidos y México. El artista también ha expuesto su obra en el Museo Reyes Meza de Nuevo Laredo, en la Comisión Europea de Bruselas y en el aeropuerto Benito Juárez de Ciudad de México. Marín vive y trabaja actualmente en Ciudad de México.